Un vacío profundo se siente en el estómago, las nubes se despejan en el mar inmenso de la mente y dejan pasar al sol que cae inútil sobre las aguas, es que la tierra es creada a través de un solo deseo, impetuoso e irrespetuoso sobre los altares de la vida, la sensibilidad del ser humano, su esquema sensual entero crea y destruye de una manera cruel, porque engaña al su posador, quiero decir, ¿Qué tan seguro es el ser humano se su propia existencia? y luego a este se le abre un mundo totalmente absurdo y él se lo cree, por muy real que sea vea este mundo basta la lasiva pregunta ¿Cómo llegó a formarse así? y el cascarón de realidad tiembla hasta sus cimientos.
¿No les parece extraño el mundo? es decir ¿Que las cosas sean así como están? ¿Donde quedaron las otras posibilidades?¿Por qué se obligó la existencia? las preguntas se amontonan cada vez mas profundas y retumbantes, ¿Qué si no la existencia? la vida es arrojada sin mas en un mundo absurdo, el parto de la muerte hacia la vida es ciego y traumático pues olvida todo lo que hubo antes y no anticipa lo que hay despues, la incapacidad humana, la propia debilidad del ser nos obliga a creernos a nosotros mismos, no solo la información de un defectuoso aparato sensual, sino la misma comunicación de la mente, los pensamientos parecen cuerdos y tienen sentido, pero ese sentido es autoconferido como un juez que se da la razón.
Si hablamos de un totipotente y luego hablamos de un "es que de otra forma no pudo ser" lo que generamos es una contradicción muy perturbante, el mundo es cruel no porque la moral de nuestros ojos y desiciones, es decir la responsabilidad, la prudencia o la libertad nos digan que cosas suceden entre seres humanos, sino que es cruel y maravillosa porque nos permite dudar de ella y mostrarnos realmente que significa el "todo lo puede", un lunático no es culpable de su falta de control, mal que mal nadie le dijo como vivir.
de esto no solo se desprende tormento para el ser que piensa a través de la niebla sino alguna conclusiones muy inmediatas:
Nadie sabe como vivir,
Nadie puede tener la razón sino es autoconferida.
La misma pluralidad de las persona es puesta en cuestión cada vez que se repara en ella.
La identidad es un placebo.
La individualidad y el ego pueden ser infinitos pero insoportables.
La realidad es una terapia creada para impedir el trauma del vacío.
El vacío es tan real como la realidad.
Todo lo que existe incluyendo mi verbo y mi duda son un sistema que se autosostiene.
La realidad verdadera no existe, el mundo es un mundo de apariencias.
Ahora sucede algo curioso:
La vida y el verbo son totalmente insignificantes pues carecen de sentido.
La vida y el verbo son magníficas y muy grandes pues todo sucede en ti.
